Murmullos es la octava canción que formará parte del disco Marzo que sacaré en unos días.
Se grabó el día 12 de marzo y con ella tuve que poner punto y final a la idea de componer 31 canciones en este mes porque (además de que lo que no pué ser es imposible) estaba agotado de tanto hacer canciones y pasarme todas las tardes con la pluma en la mano, intentando sacar piezas nuevas.
Esta canción es un alegato contra los tontos, una de cuyas principales características es que jamás van a tener valor suficiente para decir nada en la cara a nadie y siempre prefieren criticar por la espalda cuando saben que la audiencia les va a ser favorable; suelen ser envidiosos pero lo suficientemente soberbios como para reconocer su miseria moral.
La canción, por cierto, parece que está cantada con rabia. Y lo está. 🙂
Escucho sus murmullos
pero nunca me he vuelto a replicar.
No es simple orgullo
es que no vale la pena contestar
a tontos del culo
que viven solo para criticar;
cuatro garrulos
que, por mí, podrían reventar.
Envidia y soberbia
es lo que corre por la sangre de los tontos.
Envidia y soberbia
es lo que corre por la sangre de los tontos.
Toda una vida
con la frente alta, sin mirar atrás.
Ni una huida
aunque haya doblado la rodilla al avanzar.
Guardo las heridas
para cuendo llegue la hora de ajustar;
no se me olvidan:
preparaos a la hora de cobrar.
Envidia y soberbia
es lo que corre por la sangre de los tontos.
Envidia y soberbia
es lo que corre por la sangre de los tontos.