El próximo 6 de junio, la Premier League se enfrenta a una votación trascendental en su Asamblea General Anual: la posible eliminación del sistema de Video Assistant Referee (VAR). Esta votación, promovida principalmente por el Wolverhampton Wanderers, ha generado un intenso debate en el mundo del fútbol inglés y más allá. Te explico las razones que ha esgrimido el Wolverhampton para respaldar su propuesta de abolir el VAR, una tecnología que ha sido objeto de polémica desde su implementación en 2019.
Vaya por delante que mi análisis no es del todo objetivo porque es algo que yo vengo defendiendo desde hace años: ni me gustó cuando se implantó ni me gusta cómo ha afectado al fútbol.
La Propuesta del Wolverhampton
El Wolverhampton ha sido claro y directo en su postura sobre el VAR. En una carta enviada a la Premier League, el club explicó su decisión de presentar formalmente una resolución para provocar esta votación. Según los Wolves, la introducción del VAR, aunque tomada con buena fe y con los mejores intereses del fútbol en mente, ha resultado en una serie de consecuencias negativas no deseadas que, según ellos, están dañando la relación entre los aficionados y el fútbol y socavando el valor de la marca Premier League.
Impacto en la celebración de los goles y la pasión espontánea
Uno de los puntos más críticos que plantea el Wolverhampton es el impacto negativo que el VAR ha tenido en la celebración de los goles. Argumentan que la revisión constante de los goles por parte del VAR ha eliminado la pasión espontánea y la alegría inmediata que hacen especial al fútbol. Los aficionados ya no pueden celebrar con la misma intensidad, sabiendo que el gol puede ser anulado minutos después. Esta espera ansiosa socava la esencia del deporte y su capacidad de generar emociones instantáneas.
El VAR ha interrumpido el rápido ritmo característico de la Premier League. Las largas revisiones y el tiempo añadido resultante han hecho que los partidos se alarguen excesivamente, afectando tanto a jugadores como a aficionados. La constante interrupción y el prolongado tiempo de revisión alteran la experiencia del partido y pueden desviar la atención del juego mismo hacia las decisiones del VAR
El Wolverhampton también destaca la frustración y confusión que el VAR ha generado dentro de los estadios. Los largos controles del VAR y la mala comunicación durante el proceso han dejado a los aficionados perplejos y enojados. Esta falta de claridad y las extensas pausas han transformado el ambiente en los estadios, volviéndolo más hostil, con frecuentes protestas y abucheos dirigidos tanto al VAR como al himno de la Premier League.
Se ha sobrepasado el propósito original del VAR
El VAR se introdujo con el objetivo de corregir errores claros y obvios, pero según los Wolves, ahora se utiliza para analizar decisiones subjetivas, lo que compromete la fluidez e integridad del juego. Este uso excesivo y minucioso del VAR ha desvirtuado su propósito original y ha afectado la dinámica natural de los partidos, disminuyendo la responsabilidad de los árbitros en el campo. Con la red de seguridad que proporciona el VAR, los árbitros pueden depender demasiado de la tecnología, lo que erosiona su autoridad y toma de decisiones en tiempo real. Esta dependencia tecnológica ha llevado a una disminución de la confianza en los árbitros y en el sistema de arbitraje en general.
Pese a la intención de reducir errores, el VAR ha sido protagonista de numerosos fallos y decisiones polémicas que han alimentado la desconfianza entre los aficionados. Los errores persisten incluso después de múltiples vistas y repeticiones, lo que daña la percepción pública sobre la precisión y justicia del VAR. Esta continua controversia no solo afecta la confianza en los estándares de arbitraje, sino que también perpetúa teorías de corrupción y favoritismos absurdos.
Un análisis que comparto
El Wolverhampton sostiene que el precio que se paga por un pequeño aumento en la precisión va en contra del espíritu del juego. Argumentan que el VAR, en su forma actual, ha causado más problemas de los que ha resuelto, y por ello, creen que debería ser eliminado a partir de la temporada 2024-25. Proponen un debate constructivo y crítico sobre el futuro del VAR, enfatizando la necesidad de mantener la esencia y la pasión del fútbol intactas.
El futuro del VAR en la Premier League está en manos de los 20 clubes que votarán el próximo 6 de junio. Se necesitará el apoyo de al menos 14 clubes para abolir el sistema. La decisión que tomen no solo afectará a la liga inglesa, sino que también podría tener repercusiones en otras ligas y competiciones que han adoptado el VAR como una herramienta esencial para el arbitraje.
A ver si toman nota en La Liga.
