El caso de “Rust” se acerca a su fin y ha dado un paso definitivo recientemente con la condena de Hannah Gutiérrez Reed, la armera de la película, a 18 meses de prisión por homicidio involuntario. Este desenlace pone fin a un período tumultuoso que comenzó con el trágico accidente en octubre de 2021, cuando Alec Baldwin, actor y productor de la película, disparó accidentalmente un arma de atrezzo que resultó estar cargada con munición real, matando a Halyna Hutchins, la directora de fotografía, e hiriendo al director Joel Souza.
El incidente ocurrió durante los ensayos de una escena en el set de “Rust”, ubicado en el Bonanza Creek Ranch, en las afueras de Santa Fe, Nuevo México. Baldwin estaba practicando cómo sacar y apuntar el revólver bajo la guía de Hutchins y Souza cuando el arma se disparó. La bala impactó a Hutchins en el pecho, causándole heridas mortales, y también hirió a Souza.
El papel de Gutiérrez Reed como armera era esencial para garantizar la seguridad en el manejo de todas las armas en el set. Sin embargo, los fiscales argumentaron que cometió múltiples fallos de seguridad y descuidó sus responsabilidades, que incluían la verificación del arma y las municiones que la cargaban. En el juicio, se reveló que entregó el arma a un miembro del personal que no debía manejar armas en el set y luego abandonó el área de rodaje cuando Baldwin disparó el arma porque tenía otros trabajos que hacer.
La defensa de Gutiérrez Reed argumentó que ella fue el chivo expiatorio de los fallos de seguridad más amplios en el set y que la falta de tiempo, recursos y personal adecuados contribuyeron a la tragedia. A pesar de estos argumentos, los jurados la encontraron culpable de homicidio involuntario, aunque fue absuelta de una acusación separada de manipulación de pruebas.
El veredicto ha sido un recordatorio sombrío de que la seguridad es lo primero, sin importar las circunstancias. La sentencia impuesta, ami entender, no refleja la gravedad del incidente y la responsabilidad que los profesionales deben asumir en sus roles, especialmente cuando se manejan elementos potencialmente letales como las armas de fuego.
Por su parte, Alec Baldwin también se enfrenta a acusaciones de homicidio involuntario y su juicio está previsto para los próximos meses. Baldwin ha mantenido su inocencia, alegando que no sabía que el arma estaba cargada y que nunca apretó el gatillo sino que el arma se disparó sola (esto último -me parece a mí- sólo es una argucia ideada por sus abogados para tratar de inducir una duda razonable en el jurado que le exima de responsabilidad penal). Un juez está evaluando un recurso para desestimar las acusaciones contra él, lo que añade otra capa de complejidad al caso, pero que ahora cuenta con la ventaja de que la armera ya ha sido declarada culpable del caso.
Por supuesto, que nadie piense que un incidente como este, por mucha repercusión mundial que haya tenido, va a cambiar nada en la industria de Hollywood, presionada como está por los productores para rebajar los costes al mínimo y mantener la competitividad de los productos audiovisuales. Durante un tiempo me imagino que los actores manejarán las armas con más cuidado pero cuando pase cierto tiempo todo se habrá olvidado y dentro de unos años volveremos a ver un accidente similar donde alguien resulta herido o muerto por el uso inadecuado de armas de fuego durante el rodaje de una película.
También hay que tener en cuenta que este caso se ha hecho conocido en todo el mundo porque uno de los implicados es el famosísimo actor Alec Baldwin pero todos los días se están produciendo incidentes en los rodajes alrededor del planeta protagonizados en muchos casos por especialistas que se juegan la vida por dos duros y eso es algo que esta sentencia no va a cambiar.
A partir de ahora cuando veas una película donde el actor sale volando por los aires o huye de los malos en medio de una ensaladilla de tiros, acuérdate de que hay alguien que se está jugando la vida para que tú desde tu sofá puedas estar entretenido; igual así ahora valoras más el trabajo de los muchos currantes que sacan adelante cada producción.
